La maternidad, un rol mucho más que biológico

#Sheila – #InstintoMaterno

Una madre no necesita ser perfecta, sino amar

Hoy celebramos el día de la madre en el cual la referencia predominante es a la madre biológica, a al que nos han y ha engendrado.

En estos días también estamos sobrepasados en nuestra capacidad de asombro por el caso de Sheila Ayala, una niña asesinada que devela una trama en la que el misterio de la vida y la muerte se mezclan, su asesina dio a luz en estos días, su madre fue privada de su tenencia. ¿Quién era su madre? ¿Había madre? ¿Su asesina es madre de su hija recién nacida?

Solo preguntas sin respuestas o respuesta necesariamente parciales que impiden ver el conjunto.

La función, el rol, sin embargo, va mucho más allá de ello, y de esos seres, y al mismo tiempo excluye a quienes siendo madre biológica, no han cumplido, por diversas razones un rol.

El dilema «nature vs nurture», naturaleza, o biológica vs nutrición, en referencia a todo el proceso de cuidado y crecimiento del infante humano, se inclina aún en la necesidad de ambas, decisivamente al largo proceso de proveer los cuidados y afectos especialmente que permitirán crear una piel emocional, cognitiva, , que implicara ese apego primario que en caso de existir , le permitirá a ese ser sin piel emocional comprender que por el solo hecho de existir, es amado, es digno de ser querido y protegido, que no necesita hacer, más que existir, para poder estar integrado en el otro, que en esa primera instancia es un solo ser , la madre.

Bowlby llamó a esto apego primario, y describió como las diferentes formas de apego, darán luego a las diferentes formas del ser de integrarse con el mundo, en encontrar básicamente un mundo compasivo, comprensivo, y al cual está integrado o un mundo hostil en el que deberá luchar para subsistir, al menos emocionalmente, deberá lograr ser querido, y no serlo en su sola existencia.

En este terreno ingresan esas mujeres y hombres a veces que, en esa mirada, en ese dar en ese contacto primero van a dar esa seguridad instintiva que el mundo no es un lugar peligroso, que puede apagar sus señales de alarma y vivir en un ambiente de confianza.

Sobre esta base la figura del «pater», del padre, podrá instaurar la norma, la aceptación de límites, mapas conceptuales, sin que ello implique el sometimiento al mundo sino poder integrase en sus leyes, sin por eso perder la identidad propia,

¿Qué pasa cuando esto no ocurre?

Allí tenemos todos los casos que nos “sorprenden” cotidianamente, en el cual niños, muy frecuentemente niñas, no son sino objetos, nunca han entrado en la posibilidad de establecer, unas subjetividades dirán desde una escuela, una estructura psíquica, pero con especial acento en lo emocional instintivo de persona.

Esos seres serán luego también madres y no podrán trasmitir aquello que carecen y seguirán re-victimizando en su inevitable victimización traumática.
La norma luego no tendrá terreno para crecer e instalarse, la tierra donde intentamos esa semilla no lo permite.

De allí que el día de la madre es a todas aquellas personas que hasta en el desconocimiento del papel trascendental, heroico, tiene y han tenido para la sociedad.

A veces son las madres biológicas, muchas veces son solo enormes benefactoras de la humanidad.

Feliz día de la madre.

4 COMENTARIOS

DEJA UNA RESPUESTA

Ingresa tu comentario
Por favor, ingresa tu nombre